|
INDICE DE RESULTADOS XOCHIMILCO |
Variables asociadas al consumo |
|
|
Para la delegación Xochimilco, se encuestó una muestra de 16 escuelas, 9 de nivel secundaria, 4 bachilleratos y 3 técnicas con un total de 579 estudiantes encuestados. |
|
CARACTERISTICAS SOCIODEMOGRAFICAS |
De los 579 estudiantes encuestados en la delegación Xochimilco, 52.7% pertenece al sexo masculino y 47.3% al sexo femenino. En la distribución por grupos de edad se observa que el 56.1% tiene 14 años o menos, y el 89.5% es menor de 18 años. |
El 61% de la muestra se ubica en el nivel secundaria, 20.6% en el nivel bachillerato y el 18.5% en escuelas técnicas. |
Además, cuatro de cada cien estudiantes encuestados había dejado los estudios el año anterior a la encuesta y nueve de cada cien trabajó tiempo completo durante el mismo periodo. |
El tabaco y las bebidas alcohólicas son las sustancias más consumidas por los estudiantes encuestados, a pesar de que el 89.5% de ellos son menores de edad y la venta de estos productos les está prohibida. |
El 52.8% de los estudiantes encuestados ha fumado tabaco alguna vez. Este porcentaje es ligeramente menor al observado en todo el Distrito Federal (55.4%) (Gráfica 1). |
Los índices de uso son mayores entre los varones con relación a las mujeres (58% y 47.1% respectivamente) ( Gráfica 2). |
El consumo se incrementa con la edad, el 34.4% de los estudiantes de 13 años o menos reporta haber fumado. En tanto, esta conducta se observa en el 70.8% de los jóvenes de 17 años o más. |
El porcentaje más alto de consumo de tabaco de esta delegación se ubica en las escuelas técnicas (84.1%) y los bachilleratos (58.8%). En tanto, en las escuelas secundarias el consumo es de 41.1% (Gráfica 3). |
El consumo de tabaco es más alto entre aquellos estudiantes que no fueron estudiantes de tiempo completo (67.1%) o entre aquellos que habían trabajado medio tiempo (78.6%) (Gráfica 4 y Gráfica 5). |
El 48.5% de los estudiantes de esta delegación ha consumido bebidas alcohólicas en alguna ocasión, el 37.1% lo ha hecho en el último año y el 24.9% las ha consumido en el mes anterior al estudio. Estos datos reflejan un menor consumo en los tres tipos de prevalencias para la delegación Xochimilco con relación a los resultados observados en el Distrito Federal (54.4%, 42.1% y 30.1% respectivamente) ( Gráfica 6). |
El uso experimental de alcohol es mayor en los hombres que en las mujeres (52.5% y 44.2%). También en el consumo del último año los hombres han consumido más que las mujeres (41.6% y 32.1%). Las diferencias se incrementan cuando se considera el consumo en el último mes, con una proporción de casi dos hombres por cada mujer (Gráfica 7). |
Los índices de experimentación se incrementan con relación a la edad. El 29.7% de los estudiantes menores de 14 años reporta haber ingerido bebidas alcohólicas. En tanto, el 78.4% de los adolescentes mayores de 18 años señala haber consumido alcohol. Esta misma tendencia se observa para el consumo en el último año y en el último mes. |
El índice más alto de consumo en el último mes se observa en las escuelas técnicas (47.7%), seguidas por los bachilleratos (31.9%) y las secundarias (15.6%). |
El consumo de alcohol es más alto entre los que estudiaron medio tiempo (60%), o que no estudiaron (59.1%) y entre los que trabajaron medio tiempo en el año previo a la encuesta (71.4%). |
Con relación a la cantidad de consumo, el 1.7% de los estudiantes encuestados reporta consumir cinco copas o más en una sola ocasión, una o más veces en la última semana y el 17.8% señala haberlo hecho una o más veces en el último mes. |
En cuanto al tipo de bebidas alcohólicas, los hombres prefieren en primer término a la cerveza (39.3%) y después los cocteles (30.8%). En tanto, las mujeres prefieren en primer lugar los cocteles (29.2%) y en segundo término la cerveza (22.3%) (Gráfica 8, Gráfica 9 y Gráfica 10). |
Los estudiantes entrevistados en esta delegación han experimentado más frecuentemente con dos tipos de drogas: mariguana (4.1%) e inhalables (3.1%). La siguiente droga de preferencia es la cocaína (1.6%). |
Con relación a las tres prevalencias, se observa que esta delegación tiene menor consumo de mariguana, cocaína e inhalables con respecto al resto del Distrito Federal (Gráfica 11). |
Los índices de experimentación son más altos en los hombres, con relación a las mujeres, de manera que por cada seis hombres que experimentan con mariguana, una mujer la ha probado. En el caso de los inhalables esta relación es de siete hombres por cada mujer. |
Los índices de consumo muestran un marcado aumento conforme incrementa la edad de los usuarios. Por ejemplo, el 1.9% de los menores de 16 años reporta haber probado la mariguana pero esto ocurre en el 9.9% de los adolescentes con 16 años o más. El consumo de cocaína es de 0.7% en menores de 16 años y de 3.7% en los de 16 años o más. Lo mismo ocurre con los inhalables, donde los porcentajes son 2.2% y 5.6%, respectivamente (Gráfica 12). |
El consumo de este tipo de drogas en general es bajo (Cuadro 1). De manera específica, el consumo alguna vez de tranquilizantes es de 2.4%, el de anfetaminas de 0.9% y el de sedantes es mínimo (0.3%). |
En cuanto a la distribución por género, los hombres tienen mayor consumo en los tranquilizantes (2.6% por 2.2%), y de anfetaminas (1.3% por 0.4%). |
Al observar las tendencias en las prevalencias de consumo en el último año, entre las encuestas de 1993 y 1997 que tienen metodologías similares, para los hombres se encuentra que el consumo de mariguana, cocaína e inhalables ha incrementado. El mayor aumento se presenta para la mariguana (1.5% a 4.3%). |
Para las mujeres, el consumo de las diferentes sustancias presenta cambios mínimos ente ambos estudios (Cuadro 2). |
Percepción de las consecuencias del consumo de drogas en la escuela |
Se les preguntó a los estudiantes qué hacía el maestro si un estudiante llegaba intoxicado. De acuerdo con los alumnos, las acciones más frecuentes del maestro son mandar traer a sus papás (68%) y tratar de ayudar aconsejándolo (59%). En tanto, las acciones menos reportadas son que el maestro le llama la atención, lo regaña (23%) o no hace nada (31%). |
En general los maestros muestran poca tolerancia social ante el consumo de sustancias. El 75% de los estudiantes indica que sus maestros verían muy mal si ellos fumaran. En tanto, el 83.9% señala que verían muy mal si consumieran alcohol, y para el consumo de drogas se percibe aún menor tolerancia por parte de los maestros, ya que el 96% de los adolescentes así lo reporta. |
Estos datos varían bastante cuando el referente de la tolerancia social son los propios compañeros del adolescente. En el caso de alcohol y el tabaco, solo un 48.6% y un 45.5% respectivamente, de los adolescentes reporta que sus compañeros verían muy mal estas conductas. En el caso de las drogas este valor es mayor (75.3%), aunque sigue siendo bajo con relación a lo que perciben de sus maestros (Gráfica 13). |
Un aspecto que protege a los estudiantes con relación al consumo de sustancias, es el riesgo percibido asociado al consumo. Los resultados del estudio indican que los adolescentes perciben dicho riesgo como alto. De manera que más del 85% reporta que es muy peligroso el uso de la mariguana o la cocaína, la heroína o los inhalables. En tanto, más del 58% indica como muy peligroso fumar 5 ó más cigarrillos diarios, al igual que consumir frecuentemente alcohol (Gráfica 14). |
|
Los resultados de esta encuesta confirman la tendencia observada en estudios anteriores en lo que se refiere a los índices de abuso de tabaco y bebidas alcohólicas en la población estudiantil. Un índice elevado de estudiantes consume altas cantidades de alcohol semanalmente, práctica que se asocia principalmente con el consumo de cerveza y cocteles. |
En la delegación Xochimilco existe un índice ligeramente menor de experimentación con tabaco (52.8%) y alcohol (48.5%) con relación al promedio del Distrito Federal (55.4% y 54.4%, respectivamente). |
Xochimilco es una de las delegaciones en donde los estudiantes reportan beber 5 copas o más de alcohol en una sola ocasión, una o más veces en la última semana (1.7%), con una frecuencia inferior a la observada en la Ciudad de México (2.3%). |
La prevalencia de consumo en el último año de mariguana (2.8% vs 3.2%) es muy similar a la del Distrito Federal. La cocaína (1.0% vs 2.7%) e inhalables (1.2% vs 2.3%) presentan un consumo inferior al promedio global. |
A través de estos datos se observa que el consumo de alcohol y tabaco es elevado, pareciera ser que su uso es una práctica común, que no se altera por las leyes que prohiben su venta a menores de 18 años. También son estas sustancias las que presentan una baja percepción de riesgo y una elevada tolerancia social, a diferencia con el consumo de drogas, en el que se reporta una mayor percepción de riesgo y una baja tolerancia social. |
La información pone de manifiesto, la necesidad de instrumentar programas preventivos tanto a nivel primario, para evitar que el consumo de sustancias se siga extendiendo entre los estudiantes, como a nivel secundario, para impedir que aumente el abuso de tabaco y alcohol de manera preocupante en esta población. |
Después del tabaco y el alcohol, las drogas más consumidas por los estudiantes de esta delegación son: la mariguana, los inhalables y la cocaína siendo los inhalables los que presentan mayor consumo en estudiantes de 15 años o menos, y la mariguana entre los estudiantes de 16 años o más. Cabe señalar, que el consumo de sustancias psicoactivas es mayor conforme aumenta la edad de los adolescentes. |
Los índices de tolerancia social son bajos, lo cual indica que, en general, el consumo de drogas no es aceptado. Esto puede funcionar como un fuerte factor de protección para evitar el inicio en el uso de sustancias psicoactivas. Los índices de percepción de riesgo son altos, señalando que los estudiantes perciben con gran peligro el utilizar drogas. |
Finalmente, los resultados de la encuesta indican, la necesidad de informar y orientar a los estudiantes, de ayudar a los padres para que intervengan desde la infancia, en la consolidación y el desarrollo de aspectos como la autoestima del niño y la definición clara de reglas y normas. |
Además, hay que reforzar el papel del docente y de la escuela como agentes importantes en la prevención, para ampliar su influencia protectora expandiendo sus actividades, de manera que sean pilares, junto con los propios alumnos y sus padres, para facilitar y promover que los niños y adolescentes de su comunidad participen en actividades deportivas y culturales extraclase. La tarea no es sencilla, varios aspectos de los señalados anteriormente, en especial lo relacionado a normas y valores, ya han sido retomados en el PEPCA, que es el programa preventivo maestro de la SEP, por lo que deben incrementarse los esfuerzos y las líneas de acción de éste y de otros programas de prevención contra el uso de sustancias. |
|