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INDICE DE RESULTADOS MAGDALENA CONTRERAS |
Variables asociadas al consumo |
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Para la delegación Magdalena Contreras, se encuestó una muestra de 17 escuelas, 10 de nivel secundaria, 3 bachilleratos y 4 técnicas con un total de 601 estudiantes encuestados. |
CARACTERISTICAS SOCIODEMOGRAFICAS |
De los 601 estudiantes encuestados en la delegación Magdalena Contreras, 50.4% pertenece al sexo masculino y 49.6% al sexo femenino. En la distribución por grupos de edad se observa que 59% tiene 14 años o menos, y 92.6% son menores de 18 años. |
El 66% de la muestra se ubica en el nivel secundaria, 14% en el nivel bachillerato y un 20% en escuelas técnicas. |
Además, casi siete de cada cien estudiantes encuestados había dejado los estudios el año anterior a la encuesta y cinco de cada cien trabajó tiempo completo durante el mismo periodo. |
El tabaco y las bebidas alcohólicas son las sustancias más consumidas por los estudiantes encuestados, a pesar de que el 92.6% de ellos es menor de edad y la venta de estos productos les está prohibida. |
El 55.1% de los estudiantes encuestados ha fumado tabaco alguna vez. Este porcentaje es similar al observado en todo el Distrito Federal (55.4%) (Gráfica 1). |
Los índices de uso son ligeramente mayores entre las mujeres con relación a los hombres (56% y 54.1%, respectivamente) ( Gráfica 2). |
El consumo de tabaco se incrementa paulatinamente con la edad, el 36.7% de los estudiantes de 13 años o menos reporta haber fumado. En tanto, esta conducta se observa en el 66.7% de los jóvenes de 17 años o más. |
El porcentaje más alto de consumo de tabaco de esta delegación se ubica en los bachilleratos (72.6%) y en las escuelas técnicas (65.8%). En tanto, en las escuelas secundarias este consumo es de un 48.1% (Gráfica 3). |
El consumo de tabaco es más alto entre aquellos estudiantes que estudiaron medio tiempo el año previo a la encuesta (68.8) o entre aquellos que habían trabajado medio tiempo (72.9%) (Gráfica 4 y Gráfica 5). |
El 51.2% de los estudiantes de esta delegación ha consumido bebidas alcohólicas en alguna ocasión, el 40.1% lo ha hecho en el último año y el 29.8% las ha consumido en el mes anterior al estudio. Estos datos reflejan un consumo similar en los tres tipos de prevalencias para la delegación Magdalena Contreras con relación a los resultados observados en el Distrito Federal (54.4%, 42.1% y 30.1% respectivamente) ( Gráfica 6). |
El uso experimental de alcohol es mayor en los hombres que en las mujeres (53.5% y 49%). En el consumo del último mes (30% y 29.5%) y en el último año (41.3% y 38.9%) los hombres y las mujeres han consumido en proporción similar (Gráfica 7). |
Los índices de experimentación se incrementan con relación a la edad. El 28.8% de los estudiantes menores de 14 años reporta haber ingerido bebidas alcohólicas. En tanto, el 76% de los adolescentes mayores de 18 años menciona haber consumido alcohol. Esta misma tendencia se observa para el consumo en el último año y en el último mes. |
El índice más alto de consumo en el último mes se observa en los bachilleratos (48.8%), seguidas por las escuelas técnicas (44.2%) y las secundarias (21.4%). |
El consumo de alcohol es más alto entre los estudiantes que abandonaron los estudios (55%), en los que estudiaron medio tiempo (54.1) y los que trabajaron tiempo completo (73.3%), el año pasado al estudio. |
Con relación a la cantidad de consumo, el 2.3% de los estudiantes encuestados reporta consumir cinco copas o más en una sola ocasión, una o más veces en la última semana y el 21.4% reporta haberlo hecho una o más veces en el último mes. |
En cuanto al tipo de bebidas alcohólicas, los hombres prefieren en primer término a la cerveza (43.2%) y después los cocteles (37.6%). En tanto, las mujeres prefieren en primer lugar los cocteles (31.5%) y en segundo término la cerveza (29.9%) (Gráfica 8, Gráfica 9 y Gráfica 10). |
Los estudiantes entrevistados en esta delegación han experimentado más frecuentemente con la mariguana (6.2%), y las siguientes drogas de preferencia son los inhalables (4.7%) y la cocaína (4%). |
Con relación al consumo en los tres tipos de prevalencias (excepto en el último año de mariguana) de la mariguana y los inhalables, hay mayor consumo en esta delegación con respecto al resto del Distrito Federal (Gráfica 11). |
Los índices de experimentación son más altos en los hombres, con relación a las mujeres, de manera que por cada dos hombres que experimentan con mariguana, cocaína, o inhalables, una mujer la ha probado. |
Los índices de consumo muestran un marcado aumento conforme incrementa la edad de los usuarios, por ejemplo, 3.6% de los menores de 16 años reporta haber probado la mariguana pero esto ocurre en el 13% de los adolescentes con 16 años o más. El consumo de cocaína es de 2.5% en menores de 16 años y de 8.1% en los de 16 años o más. Lo mismo ocurre con los inhalables, donde los porcentajes son 3.6% y 7.5%, respectivamente (Gráfica 12). |
El consumo de este tipo de drogas en general es bajo (Cuadro 1). De manera específica el consumo alguna vez de tranquilizantes es de 3.0%, el de anfetaminas de 1.2% y el de sedantes es mínimo (0.7%). |
En cuanto a la distribución por género, los hombres y las mujeres consumen en la misma proporción los tranquilizantes (3.0%); en tanto, las mujeres presentan un consumo ligeramente mayor de anfetaminas (1.7% por 0.7%). |
Al observar las tendencias en las prevalencias de consumo en el último año, entre las encuestas de 1993 y 1997 que tienen metodologías similares, para los hombres se encuentra que el consumo de mariguana, y cocaína ha incrementado. El mayor aumento se presenta para la cocaína (0.4% a 3.3%) y para la mariguana (1.3% a 3.6%). |
Para las mujeres, en 1997 se comienza a presentar consumo de las diferentes drogas con prevalencias que no sobrepasan el 2.7% (Cuadro 2). |
Percepción de las consecuencias del consumo de drogas en la escuela |
Se les preguntó a los estudiantes qué hacía el maestro si un estudiante llegaba intoxicado. De acuerdo con los alumnos, las acciones más frecuentes del maestro son mandar traer a sus papás (68%) y tratar de ayudar aconsejándolo (63%). En tanto, las acciones menos reportadas son que el maestro le llama la atención, lo regaña (23%) o no hace nada (30%). |
En general los maestros muestran poca tolerancia social ante el consumo de sustancias. El 72.5% de los estudiantes indica que sus maestros verían muy mal si ellos fumaran. En tanto, el 84.6% señala que verían muy mal si consumieran alcohol, y para el consumo de drogas se percibe aún menor tolerancia por parte de los maestros, ya que el 93.1% de los adolescentes así lo reporta. |
Estos datos varían bastante cuando el referente de la tolerancia social son los propios compañeros del adolescente. En el caso de alcohol y el tabaco, solo el 49.4% y el 43.6% de los adolescentes reporta que sus compañeros verían muy mal estas conductas. En el caso de las drogas este valor es mayor (74.9%), aunque sigue siendo bajo con relación a lo que perciben de sus maestros (Gráfica 13). |
Un aspecto que protege a los estudiantes con relación al consumo de sustancias, es el riesgo percibido asociado al consumo. Los resultados del estudio indican que los adolescentes perciben dicho riesgo como alto. De manera que más del 81% reporta que es muy peligroso el uso de la mariguana o la cocaína, la heroína o los inhalables. En tanto, más del 54% indica como muy peligroso fumar 5 ó más cigarrillos diarios, al igual que consumir frecuentemente alcohol (Gráfica 14). |
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Los resultados de esta encuesta confirman la tendencia observada en estudios anteriores en lo que se refiere a los índices de abuso de tabaco y bebidas alcohólicas en la población estudiantil. Un índice elevado de estudiantes consume grandes cantidades de alcohol semanalmente, práctica asociada principalmente con el consumo de cerveza y cocteles. |
En la delegación Magdalena Contreras se presenta un índice similar de experimentación con tabaco (55.3% vs 55.4%) y un índice ligeramente menor de experimentación con alcohol (51.2 vs 54.4) con relación al promedio del Distrito Federal. |
Magdalena Contreras es una de las delegaciones en donde los estudiantes reportan beber 5 copas o más de alcohol en una sola ocasión, una o más veces en la última semana (2.3%), con una frecuencia igual a la observada en la Ciudad de México (2.3%). |
Las prevalencias de consumo en el último año de mariguana (3.2% vs 3.2%), cocaína (2.8% vs 2.2%) e inhalables (2.7% vs 2.3%) son similares al promedio global del Distrito Federal. |
A través de estos datos se observa que el consumo de alcohol y tabaco es elevado, pareciera ser que su uso es una práctica común, que no se altera por las leyes que prohiben su venta a menores de 18 años. También son estas sustancias las que presentan una baja percepción de riesgo y una elevada tolerancia social, a diferencia del consumo de drogas, en el que se reporta una mayor percepción de riesgo y una baja tolerancia social. |
La información pone de manifiesto, la necesidad de instrumentar programas preventivos tanto a nivel primario, para evitar que el consumo de sustancias se siga extendiendo entre los estudiantes, como a nivel secundario, para impedir que aumente el abuso de tabaco y alcohol de manera preocupante en esta población. |
Después del tabaco y el alcohol, las drogas más consumidas por los estudiantes de esta delegación son: la mariguana, los inhalables y la cocaína. La mariguana y los inhalables son las que presentan mayor consumo en estudiantes de 15 años o menos, y la mariguana entre los estudiantes de 16 años o más. Cabe señalar, que el consumo de sustancias psicoactivas es mayor conforme aumenta la edad de los adolescentes. |
Los índices de tolerancia social son bajos, lo cual indica que, en general, el consumo de drogas no es aceptado. Esto puede funcionar como un fuerte factor de protección para evitar el inicio en el uso de sustancias psicoactivas. Los índices de percepción de riesgo son altos, señalando que los estudiantes perciben con gran peligro el utilizar drogas. |
Finalmente, los resultados de la encuesta indican, la necesidad de informar y orientar a los estudiantes, de ayudar a los padres para que intervengan desde la infancia, para la consolidación y el desarrollo de aspectos como la autoestima del niño y la definición clara de reglas y normas. |
Además hay que reforzar el papel del docente y de la escuela como agentes importantes en la prevención, para ampliar su influencia protectora expandiendo sus actividades, de manera que sean pilares, junto con los propios alumnos y sus padres, para facilitar y promover que los niños y adolescentes de su comunidad participen en actividades deportivas y culturales extraclase. La tarea no es sencilla, varios aspectos señalados anteriormente, en especial lo relacionado a normas y valores, ya han sido retomados en el PEPCA, que es el programa preventivo maestro de la SEP, por lo que deben incrementarse los esfuerzos y las líneas de acción de éste y de otros programas de prevención contra el uso de sustancias. |
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